Si en mi Post “Cómo pueden aportar valor en esta crisis los Líderes de RRHH” profundizaba en el rol y funciones del responsable de RRHH.
Hoy me ha parecido importante complementar, muy brevemente, el mencionado Post con algunos conceptos que actualmente han cobrado una importancia muy relevante.
El Responsable de RRHH no está exento de aumentar continuamente su aportación de valor a su Organización. Por ello, dado el gran avance de la IA es muy importante que la utilice con inteligencia y practicidad para reducir la energía y tiempo dedicado a tareas administrativas repetitivas que, en este momento y en un futuro muy próximo, puede desarrollar mucho mejor la IA, y así enfocarse a tareas de una mayor aportación de valor.
Por otra parte, se ha convertido en absolutamente imprescindible que el Responsable de RRHH se enfoque totalmente al negocio, lo conozca en toda su profundidad para aportar todas aquellas ideas y propuestas que se integren eficazmente en la gestión global de la Organización.
Es imprescindible que colabore muy activamente en el desarrollo del talento y la gestión permanente del cambio ya mencionado en otros Post recientes.
En síntesis, los responsables de RRHH tienen que lograr reducir notoriamente su dedicación a tareas rutinarias, mediante las diversas herramientas tecnológicas existentes, para poder aportar un mayor valor real a la Organización, mediante su detenida reflexión y a través de una mayor implicación en el negocio de su Organización.
Indudablemente, ello va a suponer un esfuerzo para los mencionados Responsables, que sin lugar a duda va a redundar muy positivamente a corto y medio plazo, tanto en la Organización como en el crecimiento, desarrollo y satisfacción de todos los implicados en la función de RRHH.
No hay ninguna duda que este es el exitoso camino de futuro !!!
Concepto esencial y palabra habitual en las distintas conversaciones.
Recientemente el Director General de una exitosa Compañía me hacía, con tono serio y preocupado, la siguiente pregunta:
¿Qué puedo hacer para incrementar el compromiso de mis equipos hacia su misión y sus responsabilidades, pues observo que dicho compromiso va disminuyendo?
La respuesta fue que es imprescindible conocer en profundidad, a las personas que integran nuestros equipos, su estilo de comportamiento, sus motivaciones y necesidades, sus miedos, sus habilidades, sus expectativas, sus inquietudes, sus áreas de mejora,… y en base a este detallado conocimiento, llevar a cabo una gestión personalizada, a medida, de cada uno de cada miembro de nuestros equipos.
Por otra parte, es básico el estar a su lado, acompañándolos, inspirándolos, escuchándolos, dándoles un apropiado feedback, y empoderándolos en todo lo posible.
Es decir, facilitándoles que vivan de forma integral nuestra Organización.
Con dichas premisas lograremos una gran potenciación del concepto Compromiso en ambos sentidos, de la Compañía hacia ellos y de ellos hacia la Compañía.
Ahora nos toca a todos “hacer los deberes” en este crítico aspecto !!!
Os comparto una frase inspiradora que me gusta presentar en los seminarios sobre Liderazgo.
Los tiempos complejos e inciertos que estamos viviendo, cuya expectatives parecen encaminades a que van a seguir en un futuro, nos llevan, ahora más que nunca, a resaltar la figura del LÍDER en mayúsculas.
Recientemente un destacable CEO, cliente y amigo, de importantes compañías me regalaba un libro “EL LIDER” número 1 en Wall Street Journal Bestseller de Gallup (empresa estadounidense de investigación y análisis de ámbito mundial). Libro cuya lectura os recomiendo.
A continuación, os detallo algunos conceptos, resultantes del importante estudio global realizado por De Gallup, y recogidos en el libro por Jim Clinton, presidente y director general de Gallup y Jim Hartes, director científico de Gallup, que han merecido mi atención:
- Uno de los mayores descubrimientos de Gallup ha sido que: el jefe o líder de un equipo es responsable nada menos que del 70 % de la variabilidad en el compromiso de sus colaboradores.
- Los 5 rasgos según Gallup, de los grandes líderes se detallan textualmente a continuación:
- Motivación: inspirar a los miembros de su equipo para que hagan un trabajo excepcional.
- Estilo de trabajo: fijan metas y proporcionan los recursos adecuados para que el equipo alcance un alto rendimiento.
- Iniciativa: mueven a la gente a actuar superando los obstáculos.
- Colaboración: construyen equipos comprometidos, unidos por fuertes lazos.
- Proceso de pensamiento. Adoptan un enfoque analítico para la estrategia y la toma de decisiones.
- Las 7 competencias que se consideran más relevantes según el estudio de Gallup (se citan textualmente):
- Construir relaciones: generar confianza, compartir ideas y cumplir con el trabajo
- Hacer desarrollar a las personas: ayudar a los demás a ser más efectivos a través de sus fortalezas, expectativas y formación.
- Liderar el cambio y fijar objetivos que concuerden con la visión planteada.
- Inspirar a los demás: animar mediante el optimismo, la visión, la confianza, los retos y el reconocimiento.
- Pensar de manera crítica: recopilar y analizar la información para tomar decisiones inteligentes.
- Comunicar de manera clara: compartir información de forma regular y concisa.
- Generar un sentimiento de responsabilidad respecto a la productividad, en uno mismo y en el equipo.
Del estudio a nivel global me queda patente, una vez más, la gran implicación que tiene el líder como motor y ejemplo ante los colaboradores para potenciar su desarrollo y fidelización.
Si antes de la pandemia, la gestión y la estrategia de las Organizaciones se había vuelto notoriamente complicada, después de las problemáticas de las cadenas de suministro, complejidad en el marco geopolítico, incrementos muy importantes de precios, reducción del crecimiento económico previsto y deseable, entorno bélico con sus implicaciones… ahora la podríamos calificar de muy compleja.
En mi labor profesional diaria, tengo la inmensa suerte de poder tomar el pulso de las preocupaciones, inquietudes y dudas que actualmente asaltan a los CEO, empresarios, ejecutivos… de distintas Organizaciones.
Una de las dudas más recurrentes e importantes es la de ¿cómo tengo que relacionarme hoy con mis colaboradores y equipos para lograr los objetivos y tener un futuro positivo para la Organización? La respuesta creo que es sencilla de manifestar y algo más difícil de ejecutar…
En dicha respuesta tenemos que encontrar un equilibrio entre Nivel de Exigencia v.s. Grado de Proximidad, con toda la amplitud que representan ambos conceptos.
Por ello, los colaboradores y equipos buscan, entre otros aspectos, en su “jefe” / líder:
- Un liderazgo inspirador del que aprender constantemente (compartir, feedback, formar…)
- Que sea capaz de lograr que el proyecto en el que están inmersos (su proyecto) sea sostenible y exitoso.
- Que su líder, en quien confían, esté capacitado mediante su profesionalidad y responsabilidad, para llevar a “buen puerto a la Organización” en los momentos que surjan dificultades inesperadas.
- Que, en dicho marco, el colaborador entienda que tiene un lugar enriquecedor y satisfactorio en dicho proyecto.
De no lograr tan significativo equilibrio, tendremos que lamentar, con mucha frecuencia, que buenos colaboradores dejen nuestra Organización en búsqueda de nuevos proyectos que satisfagan en mayor medida sus necesidades y deseos o que, por otra parte, la sostenibilidad futura de la Organización sea una verdadera incógnita.
Josep Mas